sábado

LOS PASILLOS DEL MANICOMIO

jueves

A MÍ NO ME PREGUNTES

La duda está definitivamente en bancarrota, más deuda ya que otra cosa. Anda con un excecente de preguntas, apiladas anárquicamente en la trastienda, desde hace más tiempo del que quisiera recodar.  La gente pasa por delante del escaparate obviando las ofertas de liquidación y de llévese dos al precio de una.  Es lo mismo siempre: cualquiera va al probador, pone cara de concentración y sale con un gesto definitivo de "no, gracias": "No gracias, creo que me viene demasiado grande". "No gracias, me haría parecer muy evidente, no quiero que piensen que no sé lo que quiero". El caso es que ya no la miran con deseo. Uno con afanes metafísicos, cliente habitual, le dijo el otro día a modo de confidencia que van diciendo de ella que es cosa de niños, gallegos y aficionados a la mayéutica.

ESTAR EN LA LUNA

Sí que será verdad si digo que pienso mucho, porque siempre encuentra uno mucho en que pensar -todo se piensa todo el rato-, y porque no encuentro nada mejor que hacer estos días. Claro que eso no significa ni mucho menos que piense bien, y que no me pierda en las trampas  que yo misma me voy colocando, deduciendo un error que pasa sucesivamente inadvertido en el discurso de las palabras impresas en mi frente. Quizás para pensar de la manera correcta haya que haber leído mucho antes, deshilachando de poco a poco las estructuras de la lógica del pensamiento de otras mentes, de mayor rendimiento y al fin más eficaces. Igual en esa corrección de las ideas de otros no queda mucho más que el recreo y el placer de leerse entre líneas donde uno se reconoce, en lo que ya está escrito y así debe ser.
Eso no me impide andar luego con mis pensamientos que son los de la cigarra que se tumba al sol y se ensimisma en las propias posibilidades. Divaga de una a otra historieta, calculando las opciones de oficiar de hormiga en algún futuro más o menos cercano o de cualquier otro bicho viviente, y de cualquier modo dejándose hundir en el fango tibio del lenguaje lo mismo que el niño que se pasa las horas en el baño caliente jugando. O también como el curioso al que ya la vocación temprana lo llama a ir desmontando y montando los cachivaches que encuentra por casa, sólo por ver cómo funcionan, con un gozo amateur y heterodoxo y para mayor enojo paterno.

miércoles

TECNICOLOR


martes

DE ROTOS Y DESCOSIDOS


ESTAR EN EL MUNDO

Qué bonita la modestia de los bares por la mañana, de los bares donde que la vida sea hoy sea como siempre, que no sea como en las películas, se agradece por una vez. Que se palpe tan impuesta como la dictadura la misma rutina de ayer que se nos viene encima, ésa que por encanto hoy es más costumbrista que de costumbre. Y no conseguir tomarla con el hormiguero, para que sea esa misma rutina esta vez menos enfermedad crónica en favor de un alivio de los cristales tintados de indolencia de desde que no puedo ser nadie.
Me he ido fabulando ciertas cosas pequeñas que se me manchan y se ahogan pronto en el café. Darle la vuelta hoy ciclo del sueño ha querido ser una tregua tocada de amanecer -tenía que ser un amanecer, era esa metáfora apetecible después de tanto atentado insomne.

domingo

MOHINES


Lo triste de pensar que no habrá nadie que nos piense cada día:

esperar que alguien te vea
después de tanto tiempo, se diga
"te has convertido en una bonita neurótica"
y recuerde tu voz al final del día
(es que ni siquiera las sábanas frías.)
Pensar que pueden pararte por la calle, decir
"eres de una belleza dolorosa".
Lo triste es que todos son cualquiera.
Lo triste es no sentirse familiar a uno mismo
(es que ni siquiera los espejos.)
Que te dijeran que puedes estar
perfectamente sola,
que te dictes de memoria las mentiras
(es que ni siquiera necesitar testigos.)
Lo triste de esto, escribir notas de suicidio
a perfectos extraños.


viernes

TRES PENSAMIENTOS EN LA DUCHA

Porque hay que ser sublime sin interrupción.



1. A veces me propongo sentirme como una página en blanco. Las más de las veces sólo me siento vacía.

2. Leo libros para poder responder preguntas propias con palabras ajenas. Puede que sea pereza, pero mientras pueda disfrazarlo de intelectualidad nunca lo confesaré.

3. No está mal compartir la noche con desconocidos después de todo. Estaría bien compartir algo más de comunicación. Claro que eso no está en su naturaleza.


jueves

SOUVENIR

(o reparto de bienes)

martes

FRANCESCA SE DESVANECE. parece que fue ayer.



Casualmente, el 19 de enero de 1981 una mujer se defenestró en Manhattan.